Somos Hijos del Camino

Somos Hijos del Camino

¿Alguna vez habéis leído un libro y os identificáis con el protagonista? Pero no me refiero a cuando os gustaría ser el protagonista porque quieres que te pase a ti lo de conocer a un millonario o conseguir el trabajo de tus sueños, sino a cuando de verdad lees un libro y piensas «¡pero si esto me ha pasado a mi!», pues eso es lo que me ha ocurrido a mi con Hija del Camino de Lucía Asue Mbomio Rubio.

En esta novela se narra la vida de Sandra, una joven española de padre guineano que crece en España en los ochenta sintiendo que no era de ninguna parte sino una «hija del camino». Sandra vive el racismo desde su más tierna infancia, ya que es negra en una sociedad llena de blancos y de prejuicios y de tópicos en dónde tiene que pelear para demostrar que es algo más que el color de su piel, y según vas avanzando en la novela y te sumerges en la vida de la joven Sandra te das cuenta de que Sandra eres tú, de que Sandra…somos todos.

Todas la mujeres y niñas racializadas del mundo hemos sufrido las vivencias de Sandra, los insultos, la hipersexualización y un largo etc. que cuando cuanto más lees más te ves reflejada. En mi caso las similitudes fueron incluso más allá, ya que, sin hacer mucho spoiler, la protagonista y yo estudiamos la misma carrera e incluso el Erasmus en el mismo país.

Pero cada vez que veía algún paralelismo entre Hija del Camino y mi vida, una idea se cruzaba por mi mente y es que, si yo veo mi vida reflejada en esta novela, ¿cuántas personas habrá que sientan lo mismo que yo? Tengo unas cuantas amigas que también se han leído el libro y les ha pasado lo mismo que a mí así que imagino que seremos unas cuantas y si lo piensas, es un poco triste.

Somos muchos los que crecimos sintiendo que no encajábamos, que no «éramos de aquí» porque nuestra piel y nuestro pelo eran diferentes, en muchas ocasiones me preguntaron si «sabía hablar africano», si había visto leones o incluso si las casas en Cabo Verde eran como las de aquí. Poco podía responder yo que nací en El Bierzo y había visto las mismas cosas que los otros niños bercianos, pero mis respuestas no valían porque siendo negra yo no puedo ser de aquí.

No somos de aquí, no somos de allí, somos, como bien lo describe Lucía Mbomio «hijos del camino», ¿pero acaso es algo malo? Estoy hecha de dos mundos y eso es parte de mi encanto, no tengo porque elegir entre ser española o caboverdiana, entre ser europea o africana, porque esos dos lugares pertenecen al mismo planeta.

Hija del camino es un retrato la identidad, los lazos de familia y la lucha contra el racismo perfectamente escrito por una persona que ha vivido todas estas experiencias y sabe describirlas de una manera sincera que te cala muy hondo. Una lectura 100% recomendada para aquellos que son hijos del camino o para los que quieran saber cómo se siente cuando te hacen sentir que no perteneces al lugar al que perteneces.