Historias de São Nicolau II

Historias de São Nicolau II

Continuamos con el relato de don José Alves Fortes de Caleijão (Sao Nicolau) que aquí os transcribo. Esperemos que los recuerdos de este anciano sirvan para no olvidar las bonitas historias que se esconden en los rincones de la «ilha de Chiquinho»

Texto original

Estoy seguro que fue en 1945, cuando se construyó la fuente del agua del canal. Yo estudiaba el segundo curso en la escuela Rotxinha y a diario pasaba por ahí sobre las once de la mañana.

El Dr. Américo Nascimento, que era el presidente de la Cámara Municipal, sabiendo que ahí había historia, decidió restaurar la fuente abandonada y estropeada. El día de la inauguración fui invitado a apadrinar el acto y aquí mi modesta intervención.

«Señoras e señores, en primer lugar quiero agradecer al sr. Presidente Américo Nascimento que me haya invitado a asistir a la inauguración de esta fuente de agual del canal. Señor presidente e ilustre comitiva, para nosotros, los habitantes de este pueblo Caleijão, hoy es día de fiesta. Esta fuente fue la que nos abasteció de agua para el consumo doméstico durante años. Después, las sequías persistentes llevaron a que el agua no fuera suficiente para abastecer a la población. Se hacían largas filas y se demoraba mucho en poder conseguir apenas una lata de agua. La fuente era también lugar de encuentro y de convivencia. Al caer la tarde, jóvenes y adultos se juntaban aquí, conversaban, contaban historias, adivinanzas, anécdotas; aquí era el único lugar en el que se oían noticias porque no había radio ni televsión, ni un club donde la multitud pudiera reunirse para jugar a las cartas, uril* o a las damas. Era todo aquí, sobre estas piedras. Si ellas pudiesen hablar dirian que lo que estoy contando es cierto. Aquí también era el lugar de encuentros de enamorados…En 1972 vino el agua corriente y se acabaron las reuniones, se acabó la falta de agua para el consumo doméstico. La fuente de agua corriente fue construida más abajo, el canal dejó de tener la afluencia que tenía. Hoy, gracias a Dios, con nuestra Independencia, todo cambió para mejor. Ya no tenemos esos problemas porque tenemos agua corriente en nuestras casas, ese problemas está resuelto. Los jóvenes de ahora tampoco tienen problemas de entretenimiento porque ahora hay radio, televisión, Internet, club social y polideportivo, cosas que en nuestro tiempo no existían ni en nuestros sueños. Por ello creo hemos de agradecer las diligencias de nuestro Presidente de la Cámara Municipal por restaurar un pedazo de nuestre historia. Señor Presidente, excelencia, tengo otros asuntos a los que me preocupan y como estos actos no se dan todos los días, me gustaría exponerlos aquí, ¿puede ser? El presindete ha dicho que si, que puedo exponer lo que siento, se lo agradezo, lo primero es…»

Continuará

* juego muy popular en Cabo Verde y en gran parte de África. Uril, oril, ouri, ori …tiene diferentes nombres. Oware (Ghana), Wari (Malí), Awalé (Costa de Marfil) o Warri (Caribe). Se calcula que tendrá más de mil años de existencia y que existen más de 300 variantes. https://tecuentodeviajes.com/2018/01/26/uril-viajar-a-cabo-verde/

Historias de São Nicolau

Historias de São Nicolau

São Nicolau es una de las islas que conforma el archipiélago de Cabo Verde, conocida como la «ilha de Chiquinho» por la novela de Baltazar Lopes da Silva, suele ser una isla «olvidada» por el turismo e incluso por el gobierno del país, sin embargo, yo que he estado ahí muchas veces he de decir que tiene un encanto y una magia únicas.

En mi última visita descubrí unas historias escritas por un señor de Caleijão, don José Alves Fortes que aquí os transcribo, la traducción es mía así que sed benevolentes.

Texto original de Don José Alves Fortes

Supe que nhô Pedro Lopes Da Silva, padre del Dr. Baltazar Lopes Da Silva, por problemas que tuvo con el señor Cónego Correia se enemistaron para siempre y cortaron relaciones. Nhô Pedro murió en 1933, tres años antes de nacer yo porque yo vine al mundo en 1936, por tanto yo oí lo que mis mayores me contaron.

Cuando Nhô Pedro sintió que estaba mal e que se iba a morir, en ese tiempo Cónego Correia era el único padre que estaba aquí, y dijo a su familia que no quería sombre de padre enemigo encima de su cadáver. Cuando el muriese bastaba con meterle en el ataúd y seguir directamente para el cementerio.

Nhô Germano Martins, ya fallecido, me contó que cuando tenía diecisite años, su familia tenía buena relación con la familia de Nhô Pedro Lopes y asistió al funeral. Como la familia cumplió las órdenes que Nhô Pedro, no entraron en la iglesia, fueron directamente al cementerio. En aquellos tiempos, personas como el señor Pedro, por haber sido administrador del consejo municipal, eran acompañadas poar un sacerdote hasta la sepultura, pero el señor Pedro no quiso. Nhô Germano me contó que Nhô Pedro contaba con muchos amigos y que su funeral fue una procesión bonita y que el nunc había visto una cosa así.

De aquella, se encontaban aquí deportados políticos anti fascistas, eran muy amigos del señor Pedro, por ser él un buen hombre le habían acompañado durante el funeral. Nhô Germano dijo que fue un funeral animando y bonito. En el cementerio el escuchó un discurso que el Dr. Manuel Camões hizo a pie de sepultura. Un discurso con mucha elocuencia que nunca había escuchado. El Doctor Camões que era médico-teniente, uno de los deportados políticos, en un punto de su discurso, alzó los brazos y dijo así: «El señor Pedro Lopes Da Silvad, fue un hombre ilustre, el señor Pedro Lopes Da Silva imitó al los grandes ilustres portugueses. El no quiso sombra del sacerdote enemigo encima de su cadáver e hizo bien porque un padre no salva a nadie, sobretodo a su enemigo. Un funeral se hace con un párroco solo porque es más bonito pero no salva a nadie. Descansa en paz Sr Pedro Lopes Da Silva, como fue un buen hombre le deseo um buen descanso y que disfrute de la felicidad eterna. Adiós señor Pedro Lopes.»

Oí también una historia del Dr. Baltazar cuando ejercía la abogacía. Un chico y una chica que eran novios, y la chica se quedó embarazada. Los padres de la joven se enfurecieron porque nunca les gustó ese muchacho. Como la chica era aun menor, tenía diecinueve años y por entonces la mayoría de edad era a los veintiuno.

El chico quería mucho a su novia, dijo que se casaría con ella, pero los padres no querían esa boda por lo que acudieron a la justicia y el joven fue detenido y encerrado en el calabozo a la espera de ser juzgado. Contactó con el Dr. Baltazar para que fuera su abogado. Baltazar acudió para escuchar la versión del acusado y le prometió que le defendería.

El día del juicio, el joven fue acusado fieramente por el abogado de su novia y también por otras autoridades que no sé quienes eran. Cuando fue el turno de palabra de Baltazar, llevaba con él un aguja e hilo. Invitó a uno de los miembros de la acusación, que no sé quén era, para enhebrar la ajuga que el sujetaba. Comenzó a moverse y a temblar y el hombre exclamó «¡Si sigue así no lo voy a conseguir Baltazar!»

«Y no lo va a conseguir nunca porque yo no quiero» respondió Baltazar, «Todo ocurrió porque la chica estaba con su novio y le quería, ¿saben cuando comenzó la fiesta?¿Por qué solo cuando se quedó embarazada es que fueron a la justicia?»